No sabría decir
Era solo una fría noche de marzo, el viento soplaba cantando tu nombre la luna encerrada en una piedra de cuarzo es la penuria y la vida de un hombre. Es acaso la niebla de la fría mañana o la lluvia intermitente en el balcón de tu casa la que se llevo tu imagen de aquella ventana, la que dijo adiós, y hoy ya nada pasa. Pudiera recordarte como si fuera ayer aunque no lo desee, sé que lo haría morir mil veces y en ti florecer como en ese entonces cuando aún vivía. No sabría decir porque, pero aún te recuerdo aquellas manos tibias sujetando las mías, no sabría decirlo, pero me mantienes cuerdo una imagen de amor entre mis agonías. Sin más me despido de la luna plateada mis sueños cobija, entre tus fantasías sin más me despido de ti, amada una canción de amor entre mis letanías.