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Mostrando entradas de marzo, 2013

No sabría decir

Era solo una fría noche de marzo, el viento soplaba cantando tu nombre la luna encerrada en una piedra de cuarzo es la penuria y la vida de un hombre. Es acaso la niebla de la fría mañana o la lluvia intermitente en el balcón de tu casa la que se llevo tu imagen de aquella ventana, la que dijo adiós, y hoy ya nada pasa. Pudiera recordarte como si fuera ayer aunque no lo desee, sé que lo haría morir mil veces y en ti florecer como en ese entonces cuando aún vivía. No sabría decir porque, pero aún te recuerdo aquellas manos tibias sujetando las mías, no sabría decirlo, pero me mantienes cuerdo una imagen de amor entre mis agonías. Sin más me despido de la luna plateada mis sueños cobija, entre tus fantasías sin más me despido de ti, amada una canción de amor entre mis letanías.

Alborada

Caminaba, junto a ti (como en mi sueño) sujetabas mi mano mientras caminabas vi reflejado en ti, un esplendor risueño  que me decía que tú también soñabas. No había horizontes bajo el  manto plata alborada que cobija nuestros pasos, "eternidad" es lo que la brisa relata tenue sonata el andar a pies descalzos. Caminemos juntos con ojos cerrados hacia los sueños, no hay dirección allá no nos perderemos lo juro, abrazados, maniatadas las almas quien sabrá. Pero tú vuelas mientras yo aún camino sujetas mi mano,  tiembla entre tus alas y pienso, ¿Es acaso este amor clandestino aquello que sueñas loca mientras callas? No desesperes querida, ya llegamos es un paraíso terreno entre las nubes allí estará la salvación que esperamos solo si con tus alas al edén subes. Al beber el cáliz santo de los sueños todo lo visto nos será tan extraño, moriremos sin pasar ya muchos años y yo te amaré (porque así fue mi sueño). Por: Cristian Santillán

Diarios Extimos 5 "No estoy loco"

Un día me levante con ganas de amar, y otros fueron los que amaron, no se si fue una divina coincidencia pero preferí ser un paria a ser alguien amado, la gente suele amar a otra gente, a sus iguales, inferiores o superiores pero nunca aman a los extraños, hay gente que como yo decidió alejarse de la vida terrena de los normales, es indispensable y sería bueno si toda la gente se diera un tiempo para soñar despierta, yo suelo divagar mirando al horizonte, buscando talvez el limite de los sueños, lo prohibido en la realidad. Siempre hay que mirar más allá de lo que uno conoce y solo imaginar, el resto viene después  sí, el resto viene después  por inclusión y etiqueta social te darás cuenta que eres un paria, serás excluido (si no te excluyes solo) de la sociedad en general, es que la convivencia es difícil y talvez imposible con gente que mira al mundo de otra forma, y juro que no estoy loco como todos aseguran, juro que aún encuentro fascinantes las pasiones y desventuras de las que a